Muchas personas que actualmente realizan esta actividad física, han llegado a esta práctica siguiendo una moda, otros por necesidad y algunos como complemento a su entrenamiento. Cualquiera de los caminos que han escogido las ha llevado a un buen puerto, pues es serenidad, balance y equilibrio entre mente, cuerpo y espíritu.

Cada asana o postura tiene una razón de ser, una esencia espiritual que te conecta en todos los niveles de tu vida. Esta práctica te da la oportunidad de reflexionar sobre quien eres y tu papel en la vida, reconociéndote en el otro como en un igual.

Adicionalmente, la exigencia física te permite fortalecer tu cuerpo y dominarlo a través del control mental, entendiendo que el cuerpo logra lo que la mente quiere.

Recuerda el énfasis del corazón. La mente vive en la duda y el corazón vive en la confianza. Cuando confías, de repente te centras – Osho.

Los siguientes son los beneficios que experimentas en cada sesión de yoga en Bodytech:

– Reduce el estrés. Con esta actividaad, regulas y movilizas la energía en situaciones estresantes bajando de manera efectiva los niveles de cortisol.

– Mejora la calidad del sueño.

– Aumenta la actitud positiva. La práctica regular de yoga produce mejoras en pacientes con depresión y ansiedad de manera similar al ejercicio físico gracias al aumento de la serotonina, hormona que segrega el cerebro proporcionándonos sensaciones de bienestar.

– Mejora la concentración, coordinación, tiempo de reacción, memoria y aprendizaje, evidenciando una mayor habilidad para resolver problemas. 20 minutos de yoga te aportan más beneficios cognitivos que una sesión de actividad física intensa.

– Mejora la relación de pareja y las relaciones sexuales.

– La práctica calma la voz interior disminuyendo de manera progresiva la cantidad de pensamientos negativos.

– La práctica te conecta con el campo de la potencialidad pura infinita que vive en lo más profundo del ser humano, regenerando y manteniendo la energía vital física, mental y emocional.

– La práctica te permite el acceso a estados superiores de conciencia en donde se trasciende el mundo de las formas y todo lo que él representa, recordándote que todo lo que se vive en él es Maya (ilusión).

¿Mañana, tarde o noche? A cualquier hora está bien…

Al practicarlo en la mañana te activas y liberas las cargas negativas acumuladas. Además enfrentas de manera más equilibrada las responsabilidades y tareas que tienes que desarrollar a lo largo del día y que pueden generarte estrés. Hacerlo temprano garantiza tranquilidad y calma. El silencio de la mañana te ayuda a lograr mayores niveles de concentración y una meditación más controlada.

Si prefieres el medio día, recargarás tus energías, te desconectarás de la rutina y terminarás el día más enfocado y productivo.

En las noches, el yoga te ayuda a recuperarte y volver a la calma después de un día intenso de trabajo y estudio.  Para quienes padecen de ansiedad e insomnio es una de las mejores opciones para calmar los nervios y conciliar el sueño.