Salud
Toma más el sol
POR: Redacción Fit |26 NOV. 2019| Tiempo: 5 min
Los hábitos de vida han cambiado. Cada vez se pasa menos tiempo al aire libre. El ambiente de trabajo en oficinas, comercios e incluso colegios, suele ser bajo techo. Menos ventanas y más luz artificial.
Las precauciones para exponerse al sol son bien conocidas, pero no sucede así con lo que se sabe acerca de los beneficios. Y sin embargo, según la OMS, en la actualidad es mayor el número de enfermedades derivadas de una exposición deficiente al sol, que el de las que genera la radiación producto de la exposición.
Por eso la propuesta de la semana es que conozcas los beneficios para que aceptes el reto: tomar más el sol. Aquí algunas razones:
1. Vitamina D
Aproximadamente el 90 por ciento de la vitamina D que obtiene un adulto proviene del sol, frente al escaso 10 por ciento que llega a través de algunos alimentos. La D es la vitamina que mejora la asimilación del calcio, con el consecuente beneficio para los huesos y dientes.
Numerosos estudios relacionan los niveles bajos de vitamina D con hipertensión, diabetes y, en general, riesgo cardiovascular. Además, el sol aporta un beneficio extra en este sentido: favorece la vasodilatación y ayuda a la reducción de la presión arterial.
La Fundación Española del Corazón sostiene que debemos mantener los niveles de vitamina D por encima de los 30 nanogramos por mililitro para evitar estas enfermedades y riesgos. 5 o 10 minutos de sol unas tres veces a la semana, son suficientes para estimular la producción de la Vitamina D necesaria para nuestro organismo.
2. Defensas
El sol aumenta la producción de glóbulos blancos y con ello se estimulan las defensas, mejorando el sistema inmune.
3. Mejor estado ánimo
Por fomentar la producción de serotonina (también llamada la hormona da la felicidad) relacionada con la sensación de bienestar y la reducción de la depresión. El sol es uno de los mejores aliados para el buen humor.
Recuerda: para que tomar el sol no resulte nocivo, la exposición debe ser moderada, no mayor a 30 minutos al día y preferiblemente en las primeras horas de la mañana o al caer la tarde para evitar los efectos dañinos de los rayos UV.